La fuerza de la realidad: ha muerto Néstor Kirchner

Cuando se niega la realidad, ella se encarga de que la veamos.
Ha muerto un hombre cuya forma de caminar era negando o ignorando la realidad y lo hizo hasta con su propio cuerpo enfermo. Hoy la realidad se ha encargado de mostrarle que la vida ni propia ni política se puede construir desde su ignorancia o su desprecio.
Ha muerto un hombre que para muchos "restituyó la esperanza de las mayorías castigadas y excluidas de la Argentina y la dignidad y autonomía de nuestro pais frente a los buitres despiadados de las corporaciones y organismos multilaterales de crédito"
y para otros "hizo de la prepotencia y el odio un dogma, sumado al fomento del modelo de un país bipolar en el que reina el concepto del uno contra el otro en vez del uno con el otro".
Hoy el país queda en la incertidumbre de un destino trágico entre la semilla de esperanzas de unos y la semilla de odios de otros.
La sensatez de todos tiene que llevarnos a un destino de unidad, de hermandad y unión en la diversidad que nos permita construir un país que nos contenga a todos.
Empecemos a construir desde una realidad que nos conmueve a todos como el hambre, la desnutrición, la desocupación con los elementos como la solidaridad, la tolerancia del diferente, el respeto al trabajo y la inclusión social. Hoy es tiempo de reflexión hacia un camino de paz.