Nuestro querido Jorge Lanata. Lo que decía él era verdad, sin dudas. Nos quitó la inocencia. Nos ilustró los males de nuestro país. Más no pudo. Dio todo, no escondió nada. Presentó pruebas. Llegó a los lugares más impensados buscando el último papel que demostraba que lo que decía era cierto. No sólo actuó como periodista, era una PERSONA DE BIEN. Sin resentimiento, sin chicanas baratas, con la VERDAD ante nuestros ojos. "Lo importante es la verdad, sin ideología". UN MAESTRO.
No tenemos forma de decirle GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS. Hoy lo lloramos, y lo lloramos en serio. Un valiente, un ejemplo. QEPD
No hay comentarios.:
Publicar un comentario