Cuando no te salen las cuentas...

Había una vez un jefe de una tribu nómada llamado Abdul el Masi que tenía 3 hijos.
Encontrándose ya mayor decidió dejar en herencia los 17 camellos que poseía de la siguiente manera: al mayor y primogénito la mitad, al segundo la tercera parte y al pequeño la novena parte.
Al 1º 17 : 2 = 8,5
Al 2º 17 : 3 = 5,6
Al 3º 17 : 9 = 1,9
TOTAL = 16,0
Al ver que no le salían las cuentas y que no podía partir un camello, decidió consultarlo con un buen amigo suyo, guía de una caravana de camellos de finas telas, y le dijo...
-Hamed Al-Kali amigo mío, tengo un problema que no sé como resolver. Quiero dejar en herencia mis 17 camellos a mis tres hijos y no sé como hacerlo sin que tenga que partir un camello o me sobre alguno.
A lo que Hamed le respondió...
-Querido amigo Abdul el Masi, yo te dejaré un camello, con lo que tendrás 18, y cuando los repartas como es tu deseo me lo devuelves.
Y así lo hicieron.
Al 1º 18 : 2 = 9
Al 2º 18 : 3 = 6
Al 3º 18 : 9 = 2
TOTAL = 17
Acto seguido, le devolvió el camello sobrante a su amigo, dándole encarecidamente las gracias.

Para distribuir bien, a veces tenemos que tener más para que nos termine sobrando(sic).