14 dic 2013

El elogio del delito.

Viendo lo sucedido en esta semana me vino a la cabeza el debate sobre la cumbia villera y su relación con el elogio del delito.
Lo instalaron los dos Fernández, Kirchner y la "Tota" Santillán en el 2004. Entraba una nueva forma de comunicación social?.
El cantante de “Flor de Piedra”, Juan Carlos “Monito”, opina, “son sólo testimonios que hacemos (…) para los barrios de emergencia, que son las villas, son testimonios de la realidad de lo que pasa ahí, la alta sociedad ve que esta gente existe y no hacen nada por ellos. Nosotros reflejamos eso y queremos mandar un mensaje.(…)“Cantamos lo que nuestro público necesita gritar. Pero lo más importante es que la gente además de sentirse identificada se divierte…"
En las letras se describe el contexto social según los códigos de la “calle”, los códigos de la droga, la jerga delictiva, entre otros.
Canción popular. Damas Gratis. “El vago fumanchu”:
“… adonde están los fumancheros / levanten las manos, el que no es un cheto/ esta noche hay que festejar a los / chetos vamos a matar/ la locura es un placer que el loco/ conoce / eso un cheto lo desconoce… ”
Dentro de este contexto es fundamental destacar que tanto los lideres de la cumbia nacida en las villas, como los seguidores realizan un valoración positiva por ejemplo, de su estilo de vida, resignifican los rasgos negativos convirtiéndolos en elementos “distintivos” de su condición social. No solo hacen una defensa desde el uso del código, por medio de sus letras también lo hacen desde su lugar dentro de la estructura social; desde las marcas que los caracterizan, formas de vestir, (el estereotipo común seria: tatuajes, indumentaria deportiva, pañuelo sirio, etc…por citar algunos rasgos), lugares que acostumbran frecuentar, barras bravas…
Qué se entienda, no es la cumbia villera lo que los hace delinquir. Es un componente de una cultura del delito como forma de vida.
Se acuerdan de Victor Hortel, director del Servicio Penitenciario, dirigente del “Vatallon Militante”, era un  ex integrante de la agrupación “Negros de Mierda" ?. (“tomamos el nombre vertido por el enemigo y lo usamos como idea fuerza", explicó a Perfil.com uno de sus fundadores).


Esta línea de pensamiento la dejo abierta porque merece una mayor investigación. Pero marco el 2004 como fecha de inicio. Una forma de pensar articulada a partir de la música, de las agrupaciones, del manejo de las pertenencias. Un "negro de mierda", orgulloso de serlo, que además se droga, se emborracha, roba, destruye y eso lo distingue, lo convierte en héroe de su derrota. Donde la decadencia moral lo explica y lo sustenta. Lo hace ser por el mismo "no ser". Basan su existencia en lo que carecen y eso les da fuerza, los masifica.
No salieron a rescatarlo, porque el problema era estructural y los afirmaron en su abandono. "Yo banco la cumbia villera", dijo Kirchner. Le encantaba que se identificaran
con la decadencia, los vicios y la falta de valores.
Materia prima para "el narcotráfico o cualquier variante del delito organizado, que les ofreciera una oportunidad. El joven marginado del sistema formal, encuentra en la tarea de ser diller (repartidor de droga) o "soldadito" la posibilidad de tener mejores ingresos, pero además, de “pertenecer” al grupo dominante de su comunidad. Consigue ser respetado por el resto, porque su entorno mantiene en ese sector el monopolio de la violencia. Mandan y rigen los amos del delito, y sus súbditos están mejor posicionados que los que no lo son. También ese esquema les devuelve el sentimiento aspiracional. No van a poder ser médicos o comerciantes como en el sistema formal, pero tal vez, lleguen a manejar su propia “cocina”, a ser jefes, y a tener más dinero y más respeto. La moral ya la tienen anulada por su misma pertenencia.
   Las personas que nacieron y crecieron en ese estado marginal no tienen la misma escala de valores que las que se formaron dentro del Estado regular. ." (Dr. Horacio Minotti)

La vida no tiene valor, es pura supervivencia, y la propiedad no existe, es instante. Te puedo sacar la vida, tus cosas o vos a mí, da lo mismo.
Esta es la cultura que fomentaron los Kirchner, no cabe la menor duda. Y hacia ahí vamos. No todo es destino. La misma construcción democrática requiere de nuestra expresión y decisión.
http://www.nombrefalso.com.ar/cumbia-villera-%C2%BFel-ruido-de-los-olvidados/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario