31 mar 2010

Cuál será la inteligencia cultural de nuestros líderes?


Cuentan que había dos pueblos amigos que tenían sus tierras colindantes y que competian sanamente vendiendo sus cosechas en el mismo mercado. Ambos sacaban su agua de pozos subterráneos.
Un día el pueblo A encontró que sus plantas se marchitaban y que el agua con el que regaban sus cultivos estaba contaminada..El pueblo B aprovechó la oportunidad y aumentó sus precios en los mercados, obteniendo fuertes ganancias.
El pueblo A empezó a sospechar del B, que podría estar contaminando su agua para vender más caros sus productos. Era la única explicación. Decidieron declararle la guerra y tomar sus tierras a la fuerza. Así se vengarían y contarían con agua no contaminada. Ganaron la guerra y el pueblo B se tuvo que mudar a territorios lejanos y empezar de nuevo.
El pueblo A, que ahora ocupaba las tierras sembradas del B, empezó a prosperar. Pero al poco tiempo las plantas empezaron a morir y descubrieron que otra vez la causa era el agua contaminada del pozo. Ahora no tenían a quién echarle la culpa.
Como no había culpables aparentes, investigaron las causas a fondo y se sorprendieron al descubrir que ellos mismos contaminaban su propia agua con la sustancia química que usaban para lavar sus cultivos.
Esta historia es una buena analogía de cómo las personas actúan sin ser conscientes de cómo sus actos afectan la cultura. El agua subterránea es un elemento vital para que los campos puedan dar buenas cosechas. De manera similar la cultura, que normalmente es subterránea (no somos conscientes de ella) tiene un impacto enorme en los resultados de la organización de un país.

David Fischman narra esta historia en “Cuando el liderazgo no es suficiente” (referido a las empresas) considerando la necesidad del desarrollo de la inteligencia cultural en sus líderes, por la importancia que la cultura tiene en los resultados. Todo un tema, no?. Parece que nuestros líderes están contaminando nuestra cultura. Aunque en realidad, no tengo la menor duda.

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