7 mar 2011

Cuando la estupidez se convierte en pandemia

Que alguien del gobierno diga que para abaratar la canasta familiar hay que ir al mercado ya de por sí es una estupidez. Pero cuando escuchás que la gente común lo repite se llega al paroxismo. Uno pregunta, todos pueden ir al mercado?. Claro que no. A lo que te pueden contestar: lo que pasa que los distribuidores son los que se enriquecen. Pero, digamos, cómo hacés para ir a comprar las manzanas a Río Negro, las papas a Necochea y cada uno de tus insumos al lugar de origen sin distribuidores?. Te pueden contestar: hay que comprarles a los productores locales, ellos producen de todo, sino andá a ver las ferias donde vas a encontrar de todo.
Y cuando tu interlocutor es un profesional, gran lector, ya la confusión es total.
Cómo pueden repetir como loros lo dicho por unos especialistas en disparates como si fueran verdades reveladas?.
Cuesta entender cómo se maneja un negocio. Muchas veces he escuchado que un vestido cuesta el doble que en Buenos Aires. En esos casos no se piensa que el comercio que te trae el vestido a tu pueblo o ciudad, tuvo que traer 20 vestidos de todos los talles y colores para que vos eligieras uno. Que se puede quedar con algunos vestido sin vender que pasan de moda. Que tuvo que poner una empleada, pagar la luz, el alquiler del local, los viajes a Buenos Aires para encontrar mejores modelos, los impuestos (que son infinitos). Andá a Buenos Aires, pagá $200 en pasajes y comprate el vestido. Alguien te lo tiene que acercar.
Lógico que el producto comprado en origen cuesta menos pero el tiempo que uno le dedica a comprar más barato también tiene su costo. Bien leí una vez "hay personas que nunca se atreverían a robar mi dinero, pero no tiene ningún escrúpulo en robarme el tiempo que necesito para ganármelo".
Quizás el tiempo argentino ha pasado a perder valor y lo podemos desparramar por doquier.(p.e.:lo vemos en las colas en los bancos con una cajera sola). Quizás debamos vacunarnos contra la estupidez.

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