24 mar 2010

Cuando el jilguero no puede cantar....



Este 24 de marzo elegí a Juan Manuel Serrat por todo lo que él representó en un mundo gobernado por los “dueños del silencio”. Desde sus primeras luchas: lograr algo tan simple como que en España se “permitiera” cantar en catalán, vetado por el franquismo(1964) hasta traspasar en 1971 las fronteras y convertirse en el símbolo de la libertad para toda Latinoamérica.

Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.


Golpe a golpe, verso a verso...

Cuando el jilguero no puede cantar.
Cuando el poeta es un peregrino,
cuando de nada nos sirve rezar.
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."

Golpe a golpe, verso a verso.

En 1975 en España se dictó una orden de captura por sus declaraciones en México contra el régimen franquista. Pasa a ser un exiliado. Durante once meses no puede entrar a su país por “hablar”.Tras la muerte de Franco el Rey Juan Carlos confiere la amnistía y termina su exilio.
En 1976 se prohíben sus discos en Uruguay, Chile y en Argentina.
En Junio de 1983 vuelve a Argentina, tras más de 7 años de ausencia forzosa. En Rosario, en la cancha del Club Rosario Central, bajo la tenue y elocuente luz de los encendedores, tuvimos el reencuentro con todo un símbolo y se lloraron los años de terror, de muerte, de miedos y de silencios mientras cantaba sus canciones a la LIBERTAD. Se estaba logrando una utopía.

Al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar